Era de esperar una suba generalizada de bonos y acciones luego del anuncio de acuerdo con el FMI. Pero no todo lo que brilla es oro. Había muchos que esperaban éste momento para salir y lo hicieron en la última hora de rueda. El lunes dará un último empujón y comenzará la descarga. Terminado el exitismo y el furor, con la mente fría, queda analizar que nada cambió, sólo no entraremos en default por ahora. Los problemas macro seguirán y la deuda se refinanciará, pateando el problema para adelante. Los dólares financieros y el blue bajaron fuerte y lo seguiran haciendo la semana que viene. Los comprados festejaron y los vendidos sufrieron pero aún están vivos y con ganas de revancha, la que se dará la semana que viene sin lugar a dudas.
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